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Tendencias en desarrollo sostenible para resorts

trends in sustainable resorts

El diseño de complejos turísticos que cumplan con los parámetros de desarrollo sostenible debe ser un proceso proactivo y continuo para una empresa constructora especializada en el sector. Comienza por incluir una auditoría de sostenibilidad en las etapas de planificación del resort e integra herramientas técnicas y nuevas ideas en todos los niveles operativos. Se trata de un cambio de mentalidad que mejorará enormemente la eficiencia del negocio y tendrá un impacto positivo en el entorno y en las relaciones con la comunidad local. A esto hay que sumar que, además, este enfoque es cada vez más una exigencia actual de los consumidores. Los huéspedes quieren llevar sus hábitos personales de consumo responsable al destino vacacional elegido y buscan resorts que sean coherentes con ello.

Xenia zu Hohenlohe, socia gerente y fundadora de Considerate Group, señala que el turismo sostenible o regenerativo es una de las principales tendencias en las prácticas de sustentabilidad ambiental de hoteles y resorts. Atrás ha quedado la imagen del turista depredador. Hoy por hoy, los destinos se definen por su pertenencia a un enclave específico, por su relación con las personas que lo habitan y por los ecosistemas en los que se integran. En este sentido, el turismo debe establecer unas relaciones de intercambio y no de explotación. La cultura local, el patrimonio natural e histórico y el cuidado del entorno son determinantes para el éxito de una estrategia de posicionamiento de un resort turístico en el siglo XXI.

Considerate Group, consultora especializada en desarrollo sostenible para la industria turística ha tenido la oportunidad de trabajar con empresas de todo el mundo y comparte con nosotros algunas de las acciones específicas que sus clientes han puesto en marcha para potenciar el turismo regenerativo:

  1. En los resorts de nueva construcción el objetivo es cero plásticos. Esto implica asegurarse de que todas las comodidades para los huéspedes estén fabricadas con materiales naturales, reutilizables o reciclados.
  2. En la medida de lo posible, es importante decorar las habitaciones con productos de origen orgánico o de producción local. Además, diseñar espacios con mucha luz natural que permita la ventilación con aire fresco o con soluciones que no requieran gasto energético.
  3. Destinar parte de un terreno al cultivo de un huerto propio con hortalizas, vegetales y hierbas aromáticas para usarlos en los servicios de alimentación y bebidas. Algunos centros turísticos, incluso, están construyendo colmenas o aprovechando otras oportunidades para producir parte de su propio suministro de alimentos, reduciendo así la dependencia del transporte y de los proveedores externos.
  4. Instalar sistemas de filtración de agua para ofrecer agua potable limpia y gratuita. Así, tanto el personal como los huéspedes pueden rellenar sus botellas reutilizables según sus necesidades.
  5. Instalar incineradores de residuos o depuradoras de última generación para controlar el tratamiento de basuras generadas en el complejo turístico de manera más eficiente reduciendo la dependencia del transporte y de las empresas externas.
  6. Asociarse con proyectos locales de conservación del medioambiente y promover la participación de los huéspedes en ellos mediante contribuciones o acciones puntuales durante su estadía. Hay experiencias exitosas de restauración de arrecifes de coral, protección de tortugas y preservación de lugares de interés donde anidan aves, por ejemplo.
  7. Asegurar que el complejo turístico se construye de acuerdo a alguno de los principales estándares de certificación: BREEAM (Building Research Establishment Environmental Assessment Method),  LEED (Leadership in Energy and Environmental Design) o WELL Building Standard.

Las ideas para diseñar, mantener y fortalecer complejos turísticos bajo el concepto de desarrollo sostenible deben estar en el centro del proceso de planificación y gestión del resort. Afortunadamente, en la actualidad, los consumidores exigen mayor sostenibilidad y esta demanda se alinea perfectamente con la capacidad tecnológica de estos establecimientos para satisfacerles, así como con los incentivos ambientales, sociales y económicos destinados a asumir esta responsabilidad.